¿Qué debe tener un juguete para que se considere sostenible? ¿Cómo podemos los papás y mamás elegir el mejor juguete eco-friendly para nuestros pequeños?
Desde hace algunos años, hemos vivido un gran aumento en la concienciación y preocupación sobre el efecto de nuestras acciones y de nuestro consumo en la naturaleza.
Y esto se traduce en una clara tendencia en cómo cada día más se intenta buscar una alternativa ecológica a los juguetes tradicionales.
Actualmente aún hay poca información disponible sobre juguetes eco-friendly y, por tanto, a muchos padres y madres nos cuesta identificar qué necesita un juguete para ser realmente respetuoso con el medio ambiente antes de comprarlo. ¿Cómo podemos reconocer un juguete que de verdad sea sostenible? ¿Cómo nos aseguramos de que estemos eligiendo bien y que, además, cumpla con su función educativa?
¿Qué es un juguete eco-friendly?
Un juguete ecológico es aquel que está hecho de materiales naturales que ayudan a reducir la huella medioambiental que producen, tanto en su proceso de producción como en su posterior reciclaje.
Para identificarlos con facilidad, lo primero en lo que nos debemos fijar es en el material que se ha utilizado para su fabricación (madera, algodón, material reciclado, etc.).
Adicionalmente al material, podremos encontrar algunos certificados que nos facilitan la búsqueda de este tipo de juguetes, como, por ejemplo, FSC (Forest Stewardship Council; que indica que el producto se elabora con madera de bosques sostenibles).
Después de identificar bien las opciones que tenemos disponibles en el mercado y decantarnos por un material, pasamos a la siguiente pregunta.
¿Cómo podemos elegir el mejor juguete eco para nuestros hijos?
Pues bien, antes de elegir un juguete para nuestro hijo o hija, debemos tener en cuenta algunos aspectos que harán la experiencia de juego mucho mejor para nuestros pequeños:
- el juguete deberá ser adecuado a su edad,
- será aún mejor si le permite socializar y compartir,
- la estimulación sensorial, especialmente si nuestro hijo es aún pequeño, es genial para su correcto crecimiento
- es indispensable que cuente con una buena calidad y sea seguro para los niños
- y, por supuesto, deberá respetar el medio ambiente.
Algunas de las ventajas que presentan este tipo de juguetes eco es que suelen ser atemporales y tienen gran calidad, por lo que pueden pasar de generación en generación; son juguetes que pueden estimular en gran parte su imaginación; y pueden relacionarse directamente con la naturaleza gracias a los colores, textura e incluso en algunos casos el olor que puedan tener.
Algunos ejemplos de juguetes eco-friendly que encontramos en el mercado son los siguientes:
- Big Sensory Ball Ideal para los más pequeños, este set de 5 pelotas sensoriales favorece la estimulación táctil y visual, y además contribuye al desarrollo de las habilidades motoras de los niños, siendo muy fáciles de manipular por sus pequeñas manos.
- ECO Super Kim Bloc Este clásico juguete de construcción, que cuenta con 40 piezas muy fáciles de encajar y manipular por los más pequeños, estimula la creatividad e imaginación de estos de una manera muy divertida. Es perfecto para incentivar el trabajo en equipo y la cooperación.
- Eco Nuts&Bolts Los tornillos y tuercas de gran tamaño de este juguete ayudan a potenciar la destreza manual y a la coordinación motora de los pequeños.
- ECO Activity 123 ABC El set de letras y números perfecto para enseñar a los niños sus trazos de una manera muy divertida. Además, cuenta con indicaciones que les guía para coser con un cordón a través de las piezas, lo que ayuda a favorecer su psicomotricidad fina.
- ECO Color Bears Este es el juguete eco perfecto para aquellos niños de 3 a 6 años. Con sus piezas en forma de osito ayudará a los pequeños que se estén iniciando en el mundo de las matemáticas de la forma más divertida.
Si estás interesado en conocer más juguetes de este tipo, te recomendamos visitar esta web donde podrás encontrar muchos más.
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